El primer arranque autónomo de tu sistema es lo que los ingenieros eléctricos llaman “la prueba de fuego”.
Lo primero que deberías ver cuando arranque el sistema es el menú del cargador de arranque grub
si has hecho la instalación por omisión. Las primeras opciones en el menú serán las de tu nuevo sistema Debian. Se listarán más abajo otros sistemas operativos en su sistema (como Windows) si los tenías y los detectó el sistema de instalación.
No te preocupes si el sistema no llega a arrancar. Si la instalación se completó con éxito es posible que sólo haya un problema menor que impida que el sistema arranque Debian. En muchos casos estos problemas pueden arreglarse sin tener que repetir la instalación. Una opción disponible para arreglar problemas de arranque es utilizar el modo de rescate que está disponible en el propio instalador (consulte Sección 8.6, “Recuperar un sistema roto”).
Es posible que necesites ayuda de usuarios más experimentados si eres nuevo en Debian y a Linux. Puedes intentar tener ayuda directamente en línea en los canales de IRC #debian o #debian-boot en la red OFTC. También puedes contactar la lista de usuarios debian-user (en inglés) o lista de usuarios debian-user-spanish (en español). También puedes enviar un informe de instalación tal y como se describe en Sección 5.4.7, “Enviar los informes de la instalación”. Por favor, asegúrate de que describes claramente el problema y de que incluye cualquier mensaje que se muestra de forma que otros puedan diagnosticar el problema.
Si tenías algún sistema operativo en el ordenador que no se detectó o se detectó incorrectamente, por favor, envía un informe de instalación.